GESTIÓN DE LA PERSONALIDAD
La personalidad puede caminar entre refranes: “de médico y abogado o de ángel y diablo todos llevamos algo” de modo que ante la pregunta ¿qué es la personalidad? cada cual gestiona una opinión.
La base material que sustenta los conceptos científicos parte del psicoanálisis. Y en todos los textos pueden leer algo común: la personalidad es psíquica. Es decir, la personalidad no es innata, se construye y por ende se puede transformar, interviniendo en dicho proceso factores: hereditarios, ideológicos, educativos, religiosos, sociales, históricos y sexuales. Siendo la personalidad, la articulación de los diferentes factores mencionados.
Como Directores Deportivos ¿la personalidad puede ser un obstáculo en su trabajo?. Nos hacemos eco de otra pregunta ¿el fútbol es un juego, un deporte o un negocio? El fútbol es todo eso y aún más pues genera puestos de trabajo, ocio y cultura desempeñando en cada club, sus funciones, profesionales altamente cualificados.
Las cifras del año 2007, dan cuenta de 700.000 licencias federativas en España; significa eso que existen miles de familias que trabajan por y para el fútbol.
El trabajo (concepto central de la humanidad) es la capacidad que el hombre adquirió, para con otros semejantes, poder transformar la naturaleza y hacer más confortable todo aquello que forma parte de la vida, el estudio, el trabajo, el ocio, la familia, sus ideales, la salud…
Todos los pensamientos que el sujeto tiene con respecto al trabajo son producto efecto de una ideología. La ideología es ese modo particular de hacer y pensar que todos tenemos, esa manera en la que nos fueron transmitidos nuestras primeras experiencias, hábitos, afectos, ideas, gustos, ambiciones, temores, sexualidad…Es decir la ideología que nos habita nos fue transmitida (no es algo natural u original). En algún libro se encuentra escrito esa manera de ser, esa personalidad, alguna tradición la sostiene, algo heredamos que nos fue transmitido inconscientemente.
¿Se han preguntado de donde procede esa manera de hacer y pensar que tienen? Podemos incluso llegar a creer que el quehacer de cada uno es siempre el mejor. Por ejemplo un director deportivo debe saber escuchar y con quién está hablando, para que sea el proyecto deportivo, y no los gustos personales, los que dirijan la función.
Para un director deportivo es de gran eficacia conocer la posible existencia de: “deseos inconscientes contrarios al proyecto” ya se manifiesten en lo deportivo, lo económico o lo social. Estos deseos se pueden expresar en cada sujeto, siendo visibles en su actividad laboral y familiar. Los deseos inconscientes contrarios a un proyecto, más temprano que tarde, se terminan mostrando y con ello algo consigue el sujeto, algo se beneficia en esa traición, algo goza perniciosamente de esa manera.
Ser rico o pobre, ganar o perder, conseguir proclamarse campeón o ser mediocre son propuestas de la mente, que en cada proyecto deportivo, a través de mecanismos psíquicos se elaboran de manera inconsciente.
Siempre hay un beneficio secundario en la enfermedad, así dice el refrán: “no hay mal que por bien no venga”, quiere esto decir que en toda derrota puede subyacer un beneficio, en toda traición un goce, en todo desamor una venganza. Entonces se puede trabajar, inconscientemente, más para el beneficio secundario (individual y privado) que para el pacto deportivo (el proyecto grupal) que sostiene a cada profesional en su función. La escucha del psicoanalista puede escuchar los obstáculos y afectos que acompañan toda actividad deportiva, haciendo posible transformar los errores pretéritos en futuros aciertos y poder gozar del triunfo.
Si no fuéramos tan buenos en la derrota, seriamos mejores en el triunfo.
Nadie regala goles sin esperar algo a cambio, pues “el que regala bien vende, si el que lo compra lo entiende”.
La cuestión es que todo acto conlleva unas consecuencias, tanto hacer cómo no hacer, trabajar para el equipo o trabajar contra alguien tiene consecuencias y será en cada caso diferente el resultado final del partido. Trabajar a favor del club, de la empresa es un trabajo, también se puede trabajar individualmente sólo a favor de uno mismo. Sucede que cuando se trabaja en la posición que nos otorga la función (lugar construido por la institución) entonces el proyecto cuida lo social e individual de cada trabajador y, cuando se trabaja sólo para “mi”, se depende de “mi” estado de ánimo y de las variaciones de “mí” personalidad (generalmente infantil, neurótica y asocial)
Cuanto más implicado se encuentre en el proyecto, más libertad y eficacia tendrá en las decisiones que todo director deportivo debe asumir. Cuanto más se trabaja para el grupo mejor será el equipo y más importante será ese profesional en el club.
Aconsejamos a todos los dirigentes deportivos la lectura de la “Disección de la personalidad psíquica” de Sigmund Freud.
Autor: Carlos Fernández del Ganso
PERSONALITY MANAGEMENT
The personality can walk between sayings: "we all carry something of doctor, lawyer, angel or devil" so that before the question what is personality? Everyone manages an opinion.
The material basis for scientific concepts is based on psychoanalysis, and in all texts you can read something common: the personality is psychic. That is, personality is not innate, is constructed and therefore can be transformed. In this process take part factors like: hereditary, ideological, educational, religious, social, historical and sexual, being personality the articulation of the different factors mentioned.
As Sports Directors, Can be personality an obstacle in your work? We echo another question: Is football a game, a sport or a business? Football is all that and even more since it generates jobs, leisure and cultures, performing in each club its functions, highly qualified professionals.
The figures for 2007 show 700,000 federative licenses in Spain; it means that there are thousands of families working by and for football.
The work (central concept of humanity) is the capacity that man acquired, with other similar ones, to transform nature and make more comfortable everything that is part of life, study, work, leisure, family, their ideals, health...
All the thoughts the individual has about work are the product of an ideology. Ideology is that particular way of doing and thinking that we all have, the way they conveyed to us first experiences, habits, affections, ideas, tastes, ambitions, fears, sexuality ... In other words, the ideology that inhabits us was transmitted ( it is not something natural or original). In some book is written that way of being, that personality, some tradition holds it, we inherited something that was transmitted to us unconsciously.
For a sports director is very effective to know the possible existence of: "unconscious desires contrary to the project" even if they are manifested in the sports, the economic or the social. These desires can be expressed in each individual, being visible in their work and family activity. The unconscious desires opposed to a project, sooner rather than later, end showing itself up and with this the individual gets something, gets benefits in that betrayal, something perniciously enjoys in that way.
Being rich or poor, winning or losing, being proclaimed champion or being mediocre are proposals of the mind, which in every sport project, through psychic mechanisms are unconsciously produced.
There is always a secondary benefit in the disease, as the saying goes: "there is no evil that for good does not come", this means that in every defeat can be hidden a benefit, in every betrayal a joy, in all coolness a vengeance. Then, it is possible to work unconsciously, more for the secondary benefit (individual and private) than for the sports covenant (the group project) that sustains each professional in his role. When the psychoanalyst listens, he can listens the obstacles and affects that accompany all sports activity, making possible to transform past mistakes into future successes and to be able to enjoy the triumph.
If we were not so good at defeat, we would be better at success.
Nobody gives without expecting something in return, because "the one who gives sells right if the one who buys understands it ".
The issue is that every act carries consequences, whether doing something like not doing, working for the team or working against someone has consequences, and it will be in each case different, the final result of the match. Working for the club, for the company is a job, you can also work individually only in favour of oneself. It happens that when working in the position that the function gives us (place built by the institution) then the project takes care of the social and individual of each worker and, when working only for "me", depends on "my" state mood and the variations of "my" personality (usually childlike, neurotic and asocial)
The more involved you are in the project, more freedom and efficiency you will have in the decisions that every sports director must assume. The more you work for the group the better the team will be, and more important will be that professional in the club.
We advise all sports leaders to read “Dissection of the Psychic Personality" by Sigmund Freud.
Author: Carlos Fernández del Ganso
Translation: Esther Núñez Roma